Wednesday, July 31, 2013
Doble jornada en Connecticut: aguas abiertas en familia y retorno a la pileta
Hace un par de fines de semana protagonicé intensa actividad natatoria, va relato. Greenwich One Mile El sábado arranqué con una carrera en la playa de casa, el “Greenwich One Mile”. Esta es la tercera vez que participo; agua muy tranquila, lindo ambiente, y a cinco minutos de distancia. Muy buen evento. Y con el aliciente que este año nadé con mi hija mayor, Esperanza, de 13 años, en su primer evento de aguas abiertas “con los grandes”. El año pasado ella había corrido en la prueba para chicos, y esta vez se animó a hacer el recorrido completo. Nadamos juntos todo el recorrido (para lo cual me permitieron largar en el heat de los jovenzuelos). La nadó muy bien, hicimos los 1.600 metros en 28’ 35”. Luego del evento principal, acompañé a mi segundo hijo, Bernardino (10 años), en el “Kids Race”. Fue un recorrido corto, algo así como 400 metros (a él le resultó demasiado corto!). Lo nadó muy bien, en ocho minutos. La participación de Berna fue recogida en el medio local, “Greenwich Time”; su foto aparece con el epígrafe ” Bernardino De Aldecoa, 10, leaves the water after winning the Kid's division at this years’ 26th Annual Greenwich Point One Mile Swim Saturday, July 20, 2013. The Kid's Race was 400 yards. Photo: David Ames”. El artículo sobre la carrera, incluyendo la foto, aparece en: http://www.greenwichtime.com/sports/article/Yale-s-McDermott-wins-26th-annual-One-Mile-Swim-4676954.php#photo-4940098 Los dos chicos disfrutaron mucho su carrera, y yo, ni les cuento! Una maravilla, lindísima experiencia. Estoy seguro que muy pronto los dos me pasarán como poste, pero aun así la natación es muy generosa, y hay lugar para todos. Y todavía quedan los dos menores, que viene perfilándose bien… Wilton Summer Sizzler A raíz del mail que mandó el Flaco Espina con los tiempos para el Mundial de Montreal, me pareció que estaría bueno hacer algún experimento para verificar cuánto me falta para estar a tiro de esa prestigiosa competencia. Encontré un evento en una pileta de 50 metros más o menos cerca de casa (Wilton, Connecticut), y me anoté (50 mts crol, 50 mts pecho, 100 mts pecho). No reparé en la fecha: el evento era al día siguiente de la competencia de aguas abiertas que comenté más arriba. Y las tres carreras eran bastante pegadas, las tres durante la mañana del domingo. Igual, allá partí, en compañía de un amigo desprevenido que estaba de visita en casa, y de su hijo. Si bien el evento de Aguas Abiertas del día anterior había sido bastante tranquilo, igual me sentía un poco cansado. Y tres carreras en una mañana, sin estar bien entrenado, es quizá demasiado para mí. Pero bueno, basta de excusas. Los eventos: • 100 mts pecho: arranqué muy bien, los primeros 50 en 44”, y sintiéndome bien. Pero en los últimos 25 mts me pinché y no pude terminar fuerte. Hice 1’ 34”, bastante flojo. Hace tres años (mi última carrera en pileta, en Uruguay) hice 1’ 29” y pico, pero en pileta de 25 metros, y estaba mucho más entrenado que ahora. El tiempo para el mundial es de 1’32”, no parece tan lejos. Con buen entrenamiento me tengo fe para volver a bajar 1’ 30”. • 50 mts pecho: la corrí una hora después de la de 100 mts. Salió bien, 40.5” (mejor de lo que esperaba). El tiempo para el mundial es 41”, así que ahí ya estoy bien. Pero, más allá del mundial, estoy contento con el tiempo. Objetivo, bajar los 39”? • 50 libre: para esa carrera ya estaba cansado; y encima no es el evento en el que me siento más cómodo. Hice 32” 70”, o sea, flojo. De todas maneras, el tiempo para el mundial es de 32”, tampoco debería ser complicado. La idea es bajar 31”, y arrimar a 30”. El evento era pequeño, y –raro- había pocos nadadores de mi grupo de edad (45-49). De manera tal que gané las dos carreras de pecho (superando a mi único oponente, solo éramos dos!) y también gané la de crol, en mi carácter de único participante… En las series corrí con gente de otras edades, incluyendo jovenzuelas de veintipico. Para este evento prácticamente no hice entrenamiento específico; hice cuatro sesiones de piques, según instrucciones de Diego, vinieron muy bien para tener idea de cómo sentir las carreras, ritmo y velocidad, etc. Pero este verano he nadado poco. Quizá compensé algo un poco con un estado físico razonablemente bueno, estoy yendo bastante al gimnasio de la oficina. Eso, más el hecho de haber nadado un evento de aguas abiertas el día anterior, me llevan a pensar que se puede mejorar si me tomo el entrenamiento más en serio. Los tiempos fueron bastante dignos, a mi juicio, considerando las circunstancias. Un tema a mejorar: la largada. Me concentré excesivamente en no hacer un papelón (o sea, en no caerme!) y zambullirme prolijamente. Eso fue en detrimento de la velocidad de reacción. Acompaño documento que muestra elocuentemente este punto: las tres nadadoras que me tocaron en suerte en mi serie (grupo etario, 25-29 años!) están casi tocando el agua, mientras que yo, en el fondo con prolija gorra blanca de Inefables, todavía estoy decidiéndome… Como flaco consuelo, el señor de al lado mío (andarivel 1) parece tener una reacción aún más cansina. Habrá que trabajar en mejorar este punto! Me divertí mucho volviendo a la pileta, volveré a repetir. Veremos si arrimamos con los tiempos… Ahora queda, para el verano, último evento de aguas abiertas, Estatua de la Libertad el 16 de agosto, ya les contaré. Cristóbal de Aldecoa
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